Por tratarse de un día como el hoy, en el todavía estoy de vacaciones, os voy a narrar un sucedido ocurrido el 30 de Julio y no por casualidad.
Eran las doce y media de la mañana y mi mujer y yo aparecíamos por el Bar Elisardo de San Vicente do Grove, lugar que nos había recomendado Rocío y no por casualidad.
Allí, un sitio muy agradable, nos encontrábamos con Rocío y el abuelo (La Cocina de mi abuelo) y con Elena (Cuatro especias), enseguida supimos quienes éramos. Esto tampoco fue por casualidad.
Después fueron llegando más blogueros a los que no conocíamos, Olga y su marido (Cocinando con Kisa), mi primo Tito con su mujer (La cocina sin complicaciones), Cristina y su marido (Kanela y Limón) y claro, nos fuimos juntando un grupo de blogueros relacionados con la gastronomía, y tampoco fue por casualidad.
Y digo que no fue por casualidad, porque fueron Rocío y Tito quienes habían organizado el encuentro bloguero. Ellos se preocuparon de ir avisando a los que sabían que estábamos por Galicia de vacaciones y a los que viven en ella o cerca de ella.
No sabíamos con quien nos íbamos a encontrar, pero allí nos reunimos unos cuantos para comer, conocernos un poco más y pasar un día estupendo.
Ah! Que no se me olvide que a los cafés, apareció Fátima (simpática a más no poder) y José María de (La cocina no es lo mío) a los que también tuvimos el gusto de conocer.
Aquí os dejo algunas fotos del encuentro.
Después de aquí salió otro encuentro en casa
de Elena, pero de ese ya os hablaré otro día.