jueves, 10 de diciembre de 2009

Pollo en salsa de curry


POLLO EN SALSA DE CURRY


De este plato existen muchas versiones y posiblemente, mucho mejores que esta.

Como sabéis curry es un vocablo que designa un condimento indio y que nosotros utilizamos en la preparación de numerosas recetas.

En realidad se trata de una mezcla obtenida, reduciendo a polvo muy fino cúrcuma, pimiento amarillo, cardamomo y hierbas aromáticas.

Ahora ya se puede comprar hecho en cualquier supermercado y por lo tanto, resulta fácil elaborar este tipo de platos, sin tener que pulverizar todas las especias.

Como dije, puede que haya mejores preparaciones de “Pollo al curry” pero la receta que propongo es la que nosotros solemos hacer en casa.


INGREDIENTES ( 4 personas):

· Un pollo de 1 ½ Kg
· 2 cebollas grandes
· 3 dientes de ajo
· 1 tomate
· 4 cucharadas de cuajada (leche cuajada)
· 4 cucharaditas rasas de curry en polvo
· aceite
· 2 hojas de laurel; clavo; sal y pimienta molida.

ELABORACIÓN:

1). – Troceamos el pollo, salpimentamos y lo pasamos por un rondón o sartén alta con un poco de aceite. Sacamos y reservamos.

2). – Picamos los ajos, rallamos las cebollas y echamos en un mortero, machacando hasta conseguir una pasta.

3). – Troceamos de manera tosca el tomate y lo escurrimos de jugo.

4). – En el rondón donde hicimos el pollo, echamos la pasta de cebolla y ajo y dejamos hasta que tome color.

5). – Añadimos el tomate troceado, un poco de agua y mezclamos.

6). – Incorporamos los trozos de pollo, los clavos, el laurel, la pimienta, sal y el curry; dejamos cocer durante unos 20 minutos.

7). – Batimos la cuajada.

8). - Ahora, echamos ½ l. de agua, la cuajada batida, llevamos a ebullición y dejamos hervir a fuego lento hasta que este tierno el pollo.

Aunque la receta tiene muchos pasos, es muy fácil de hacer y realmente merece la pena.


domingo, 6 de diciembre de 2009

Rabo de toro guisado

Rabo de toro guisado
La gastronomía cordobesa es uno de los reclamos turísticos que tienen más tirón. Uno de sus platos emblemáticos es el guiso o estofado con rabo de toro.

Este plato se puede degustar en tabernas y, también, en los mejores restaurantes de la ciudad; lo pruebes donde lo pruebes y aun con las variaciones en su elaboración (cada sitio tiene su receta), a nadie deja indiferente.

De cualquier manera, aunque la paternidad del plato se le atribuye a los cordobeses, es una receta que se ha extendido por toda España y prácticamente se hace y se sirve en cualquier lugar de nuestra geografía.

En Madrid y sobre todo, durante la feria de San Isidro, existen muchos restaurantes que lo incorporan a su carta de una manera especial, como oferta gastronómica.

En mi caso y como no he encontrado el producto de toro, he utilizado rabo de buey que también sale muy rico.

Ingredientes (4 personas):
· 1 y 1/2 Kg. de rabo de toro (yo utilice de buey)
· 3 puerros
· 3 cebollas
· 3 zanahorias
· 4 cucharadas de tomate frito
· 4 dientes de ajo
· ½ l. de vino tinto
· 1 vaso de vino blanco oloroso
· 2 hojas de laurel
· 1 cucharada de pimentón (mitad dulce y mitad picante)
· 3 o 4 clavos de olor
· Sal y pimienta
· harina para rebozar
Elaboración:


1). – Una vez comprado el rabo, le decimos al carnicero que nos lo corte en trozos regulares.

2). – Limpiamos los trozos, salpimentamos, los rebozamos en la harina, freímos en una sartén con aceite bien caliente y reservamos en la cazuela donde vayamos a guisarlo.

3). – Picamos la cebolla, los puerros y las zanahorias en ruedas; dejando los dientes de ajo pelados pero enteros.

4). – En la misma sartén donde habíamos frito los trozos de rabo, rehogamos todas las verduras junto con los ajos y dejamos pochar; añadimos las hojas de laurel, los clavos de olor, el pimentón y las cucharadas de tomate, hasta que hayamos conseguido el sofrito.

5). – Ahora es cuando pasamos el sofrito a la cazuela, junto con los trozos de rabo que habíamos reservado; cubrimos con el vino y dejamos que cueza a fuego muy lento, durante dos horas y media más o menos. Durante la cocción iremos añadiendo caldo de carne a medida que el guiso lo vaya pidiendo, hasta que la carne se separe del hueso.

El secreto de este plato, es que vaya cociendo muy lentamente y por lo tanto, el tiempo de cocción es importante.

Espero que os animéis a hacerlo, aunque ya aviso que tenéis que contar con tiempo, pues el proceso es muy lento.